Starlink ha modificado una de las funciones más valoradas por sus usuarios: la posibilidad de pausar el servicio sin coste. Ahora, para mantener una suscripción en pausa, los clientes deberán pagar una nueva tarifa de USD$5 al mes.

Este cambio, llamado «Modo de Espera» por la compañía, ha generado críticas, especialmente entre quienes compraron el Starlink Mini, un servicio popular entre viajeros, campistas y usuarios de autocaravanas. Estos clientes se vieron atraídos por el modelo de «pagar por usar», que les permitía suspender el servicio durante los meses en los que no lo utilizaban, sin coste adicional.
Qué ofrece el nuevo «Modo de Espera»
Starlink promociona el Modo de Espera como una mejora que proporciona «datos ilimitados a baja velocidad» para emergencias. Sin embargo, las pruebas realizadas por los usuarios muestran velocidades de descarga de apenas 0.5 Mbps, lo que contrasta drásticamente con los más de 100 Mbps de los planes regulares.
Para los usuarios que solo necesitan el servicio de forma puntual, esta nueva tarifa de $5 mensuales se traduce en un gasto de casi $60 anuales sin recibir un beneficio significativo, lo que convierte a la suscripción en una especie de «pago anual camuflado».
La opción de cancelar y reactivar: un riesgo
La otra opción que ofrece Starlink a los usuarios que no quieren pagar el «Modo de Espera» es cancelar el servicio. Sin embargo, esta alternativa no es una solución segura, ya que la compañía de Elon Musk advierte que no puede garantizar que el usuario pueda reactivar su servicio en el futuro si su área ya está al límite de capacidad.
Para muchos, esta nueva política resta la flexibilidad que hacía de Starlink una opción atractiva para quienes necesitan conectividad solo de vez en cuando, poniendo en duda si el servicio mantiene su promesa original de «pagar por usar».