Torre Pacheco es una localidad murciana de poco más de 40.000 habitantes, un municipio que vive básicamente de la agricultura y en el que casi un tercio de la población es extranjera. Su nombre no suele colarse en los titulares de la prensa internacional, pero hoy hablan de él analistas de media Europa. El motivo: una ola de disturbios dirigidos contra los inmigrantes que recuerda a lo vivido en 2000 en El Ejido (Andalucía) o los que se han registrado en los últimos años en diferentes puntos de Europa, como Dublín o más recientemente Ballymena, Reino Unido.
Con la excepción quizás de El Ejido hasta ahora España había esquivado esa ola. La pregunta visto lo ocurrido en Murcia es… ¿Seguirá siendo así?
¿Qué ha pasado? Que Torre Pacheco, una localidad de 40.000 habitantes de la Comarca del Mar Menor, en Murcia, se ha convertido en noticia a nivel nacional e internacional, acaparando titulares en medios del alcance de The Guardian o The Telegraph. ¿El motivo? un estallido de violencia contra la población inmigrante del municipio después de que hace unos días un vecino de 68 años recibiese una brutal paliza, una agresión que las autoridades todavía están investigando (hay dos detenidos) pero que en la calle (y redes) se atribuyó a jóvenes marroquíes.
¿Por qué es noticia? Que lo ocurrido en Torre Pacheco haya tenido repercusión más allá de la prensa regional responde a varias razones. La primera, el alcance de los disturbios. Efe hablaba esta mañana de ocho detenidos, cinco españoles y tres magrebíes. El balance de heridos atendidos por los servicios de emergencia debido a brechas, golpes y traumatismos es incluso mayor. La ola de violencia alcanzó tal cota que el fin de semana la Guardia Civil tuvo que reforzar su presencia.
El desencadenante. Los altercados han sido noticia también por su contexto político y el papel que han jugado las redes. La chispa que hizo saltar los disturbios fue la paliza que recibió el miércoles un vecino de 68 años mientras daba un paseo. En una entrevista con El Español la víctima aseguró que un «chico marroquí» se dirigió a él a gritos y le propinó «un estacazo» mientras otros jóvenes lo grababan. De momento la policía ha detenido a dos magrebíes de 21 y 22 años que, si bien no participaron en la agresión, sí estaban presentes. Ninguno reside en la localidad.
De la paliza a la «caza». El suceso llevó al Ayuntamiento a organizar una manifestación para reclamar una localidad «libre de delincuencia» y desató la indignación en redes. Indignación y fake news. Poco después de que trascendiese el caso empezó a circular un vídeo que supuestamente mostraba la paliza, además de imágenes en las que se identificaban los rostros de los supuestos agresores.
La propia víctima ha dejado claro que la persona que se ve en el vídeo no es él, pero eso no evitó que el material circulase por redes junto a mensajes de grupos ultras para «cazar» inmigrantes. «Han venido de fuera del municipio a provocar porque saben que vivimos aquí», aseguraba a El País Omar, un joven de 25 años.
¿Es la primera vez? No. Lo ocurrido estos días en Torre Pacheco recuerda en cierto modo a los incidentes que se vivieron hace 25 años en El Ejido (Andalucía), aunque el balance de arrestados y heridos allí fue bastante mayor. El detonante en aquella ocasión fue tres asesinatos perpetrados por marroquíes en cuestión de dos semanas. El último de ellos lo cometió un inmigrante con esquizofrenia paranoide que acabó con el apuñalamiento de una joven en un mercadillo de Santa María del Águila, lo que desató a su vez una ola de violencia que dejó decenas de heridos.
Si este fin de semana pudo verse altercados entre ultras e inmigrantes en Torre Pacheco, en El Ejido de 2000 se vio a gente armada con barras de hierro atacando a inmigrantes y destrozando locales. Los tumultos se extendieron entre el 5 y 7 de febrero y obligaron al Gobierno a reforzar la presencia de la Guardia Civil y Policía Nacional, lo que no evitó que el episodio se saldase con varias decenas de heridos y destrozos. «Grupos xenófobos organizados han incendiado chabolas en las que se alojan inmigrantes, que asustados se esconden de las partidas de vecinos armados con palos y cadenas que recorren las calles», relataba por entonces ABC.
Más allá de España. Lo ocurrido en Murcia es noticia por otra razón más: conecta con episodios más o menos similares registrados a lo largo de los últimos años en otros países de Europa. Cambian los detalles o el alcance, pero no la diana: la inmigración. En noviembre de 2023 una serie de apuñalamientos desataron una ola de protestas violentas contra los extranjeros en Dublín y hace unas semanas un presunto caso de violación derivó en disturbios xenófobos en Irlanda del Norte.
En Suecia y Dinamarca se han convocado también protestas durante las que se han quemado ejemplares del Corán, Bélgica ha sufrido disturbios racistas y en febrero la agencia AP se hacía eco de migrantes que han percibido un «aumento de ataques racistas» en Magdeburgo tras el atentado contra un mercado navideño local.
En la agenda social. También hay movilizaciones multitudinarias de signo opuesto, en las que se denuncia la xenofobia. En marzo sin ir más lejos Francia acogió varias marchas con decenas de miles de participantes que se alzaron contra el odio a los extranjeros. El fenómeno confirma en cualquier caso que el racismo tiene una importancia cada vez mayor en la agenda social y política de Europa, un auge que coincide con el progresivo fortalecimiento de la extrema derecha.
¿Cuál es el contexto? Casos como el de Torre Pacheco, El Ejido o los incidentes de Dublín de 2023 se encuadran en un contexto claro: el aumento de la población inmigrante en Europa. En febrero EuroNews reveló que en 2024 residían en los 27 países comunitarios alrededor de 44,7 millones de ciudadanos nacidos fuera de la UE, lo que representa casi el 10% de la población total. El dato revela un aumento interanual notable, de 2,3 millones. Los países con mayor número de personas nacidas en el extranjero eran, por orden, Alemania, Francia, España e Italia.
Al menos en 2019 cerca dl 30% de la población de Torre Pacheco, en la que la agricultura tiene un peso clave, era migrante. El municipio ha visto además cómo en las últimas décadas su población se disparaba casi un 200%, pasando de apenas 15.000 habitantes a los algo más de 40.000 actuales, un «boom» que, recuerda El País, ha llegado acompañado de una generación de padres extranjeros nacida en España que encuentra dificultades para integrarse. «Son extranjeros en su casa y moros en la calle”, explica al diario el profesor de sociología Paulino Ros.
Imágenes | Ayuntamiento de Torre Pacheco, AUGC Guardia Civil (X) y Jucil Nacional (X)
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La noticia
Los disturbios de Torre Pacheco reviven el fantasma de El Ejido en el 2000: que España termine como otros países de Europa
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Carlos Prego
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