La IA no solo está transformando el mercado laboral, sino que también está cambiando la naturaleza de los trabajos en sí misma y las tareas que conforman cada puesto.
Lo que antes era un oficio altamente especializado y bien remunerado, como el de ingeniero de software, ahora corre el riesgo de convertirse en una labor mucho más rutinaria, segmentada y, sobre todo, acelerada. Algo más cercano a un operario en una cadena de montaje. Según The New York Times, algunos ingenieros de Amazon ya comienzan a sentirse así.
De la revolución industrial a la automatización digital
El impacto de IA ya se está comenzando a notar entre la plantilla de las grandes tecnológicas. No tanto por la destrucción de puestos de trabajo, como por la transformación de los que ya existían.
A menudo se equipara la llegada de la IA con la Revolución Industrial por el cambio de paradigma tecnológico que se vivió. La historia ha demostrado que, a medio plazo, la automatización no fue unida a la destrucción de empleo, sino a un desplazamiento y transformación de las tareas laborales.
Durante la Revolución Industrial, y posteriormente con el paso al modelo ‘fordista’ de producción en masa con cadena de montaje, no se destruyeron empleos. Se cambió su naturaleza. Con la cadena de montaje de Ford se sustituyó la fabricación de automóviles en talleres de manera artesanal, por trabajadores situados en una línea de montaje que se especializaron en hacer una tarea muy concreta. Esa fue la clave para aumentar la productividad y reducir costes.
La automatización permitió que los trabajadores se enfocaran en funciones específicas, mientras las máquinas asumían las labores más pesadas o repetitivas. Según un estudio realizado por investigadores del MIT y la Universidad de Pensilvania, Amazon, Google y Microsoft están utilizando sus herramientas de IA de una forma similar.
Operarios del software
Con la IA como copiloto, las grandes tecnológicas están automatizando determinadas tareas de sus ingenieros de software que antes requerían horas de trabajo. Ese tiempo liberado lo dedican a mejorar los productos existentes o sacar adelante nuevos productos en menos tiempo de desarrollo.
Es decir, se está llevando este proceso a un nuevo nivel, donde la IA empieza a desempeñar el papel equivalente a la maquinaria industrial del siglo XIX.
Andy Jassy, CEO de Amazon, reconocía en una publicación de LinkedIn que gracias a esta automatización con IA, la empresa se había «ahorrado el equivalente a 4.500 años de trabajo de desarrollo».
Almacén robotizado de Amazon
Los centros logísticos de Amazon pueden servir de ejemplo de lo que está sucediendo ahora en sus oficinas de desarrollo de software. Hace algunos años, los empleados que preparaban los envíos de Amazon debían recorrer los largos pasillos de sus almacenes para reunir los productos de cada pedido. Sin embargo, ahora la tecnología ha robotizado todo ese proceso para eliminar esa tarea de búsqueda.
Con la automatización de sus centros no se ha prescindido de esos empleos, pero ahora se dedican a tareas específicas. de empaquetado, se ha incrementado el número de pedidos que puede procesar cada empleado al día y se ha devaluado su trabajo.
Ese personal de almacén ahora asegura que su trabajo es monótono, repetitivo y mal pagado. Lo mismo que sucedió con los operarios de las cadenas de montaje. Los ingenieros de software comienzan a notar los mismos síntomas, con una aceleración de sus flujos de trabajo y mayor automatización.
«Si te dicen que tienes que revisar el código, nunca es una parte divertida del trabajo. Cuando trabajas con estas herramientas [de asistencia con IA], es la mayor parte del trabajo», aseguraba Simon Willison, programador y bloguero veterano.
Las consecuencias de esa automatización ya se están comenzando a notar en los puestos junior de distintos sectores, y el de la programación está exento. Los agentes de IA que generan código hacen la tarea que antes desarrollaban los junior y, de esa práctica, adquirían la experiencia que les permitía ascender.
Sin ese aprendizaje no se formará a unos ingenieros senior que el día de mañana pueda revisar el código generado por una IA y detectar los errores, o afrontar las estrategias de desarrollo adecuadas.
En Xataka | Ya nadie se considera clase obrera en España: el porcentaje ha caído del 50% al 16% en veinte años
Imagen | Amazon, Unsplash (Adrian Sulyok, Procreator Global UI UX Design Agency, Kseniia Ilinykh)
–
La noticia
De ingenieros a operarios del teclado: la IA está convirtiendo la programación de software en una cadena de montaje
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Rubén Andrés
.
