Europa ha tomado la decisión de caminar al coche eléctrico. Que llegue al destino de 2035, con el planteamiento de eliminar la venta de los coches con motores de combustión o que tropiece y una mano amiga le ayude a levantarse es algo que solo el tiempo dirá.
De momento, las normas están escritas. Y las normas dicen que no podrán venderse coches con motores de combustión en 10 años (siempre que no sean neutros en carbono). Pero antes, en 2030 y 2027 hay que cumplir dos hitos que deberían allanar el camino.
El primero dice que las marcas tendrán que rendir cuenta en dos años. Finalizado 2027 deberían presentarse ante Europa para demostrarles que la media de emisiones de la flota vendida entre 2025 y 2027 es inferior a 93,6 gr/km de CO2. En 2030, esta cifra se reduce a la mitad. Y la única manera de conseguirlo es electrificando (y mucho) las ventas.
Pero también sumando con coches con motores de combustión. ¿Cómo? Con todos aquellos que se muevan en la frontera o por debajo de la frontera de esos 93,6 gr/km de CO2 para que no sean una rémora a la hora de contar. Eso obliga a hacer un importante esfuerzo económico y echar muchas cuentas.
Porque electrificar un coche supone un mayor esfuerzo económico. Precios más caros que reducen el margen de beneficios en la gama que deja la cifra más exigua de toda la flota.
¿Solución? Hacer un coche con cariño.
Ficha técnica del Renault Clio
Renault clio |
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TIPO DE CARROCERÍA. |
Utilitario de cinco plazas |
MEDIDAS Y PESO. |
4,116 metros de largo, 1,768 metros de ancho, 1,451metros de alto y 2,591 metros de distancia entre ejes. Desde 1.155 (dependiendo de la versión) |
MALETERO. |
Hasta 391 litros (dependiendo de la motorización) |
POTENCIA MÁXIMA. |
160 CV |
CONSUMO WLTP. |
Híbrido: 3,9 l/100 km. Gasolina: 5 l/100 km. GLP: 6,9 l/100 km. |
DISTINTIVO AMBIENTAL. |
Cero emisiones |
AYUDAS A LA CONDUCCIÓN (ADAS). |
Confirmadas las mínimas exigidas por la Unión Europea. Hasta 29 sistemas ADAS de ayuda a la conducción, incluido control de crucero adaptativo. |
OTROS. |
Sistema de infoentretenimiento propio Open R Link sobre Android Auto. acceso a Google Assistant, Google Maps o Google Play. Dos años con tarifa de 2 GB de datos. Doble pantalla de 10 pulgadas (cuadro de instrumentos y central) |
HÍBRIDO ELÉCTRICO. |
Sí. |
HÍBRIDO enchufable. |
No. |
eléctrico |
No. |
precio y lanzamiento |
Fechas de lanzamiento y precio por confirmar. |
Mucho mimo
“Cuando diseñamos este coche lo metimos bajo llave. Teníamos que tomar riesgos y sabíamos que si se veía en las primeras fases del proyecto nos lo iban a cancelar”.
Quien habla es Paula Fabregat, jefa de diseño de Renault en los segmentos A y B. Sus palabras, mientras desgrana todos y cada uno de los detalles del Renault Clio destilan pasión. Nos explica que diseñar un Renault Clio de nuevo es un reto mayúsculo. “Es un icono para la marca pero nos encargaron hacer algo totalmente nuevo. De primeras puede que ni si quiera os recuerde a un Clio”, nos cuenta Fabregat.
Y, efectivamente, no. No nos recuerda a un Clio. Al menos de primera. ¿Eso es algo malo? Desde luego que no. El frontal es barroco, lleno de aristas y líneas de tensión. Juega con una superficie curvada en el lateral, mucho más compleja de lo que suele ser habitual en esta gama de precios. Y cierra con una trasera igual de barroca y muy arriesgada.
Si gusta o no lo dirá el mercado. Yo reconozco que el frontal no me termina de encajar. Al contrario, me parece muy meritoria una trasera tan arriesgada, con cuatro grupos ópticos que claramente recuerdan a un superdeportivo. No diría que el Renault Clio es bonito o bello pero desde luego es un coche que no deja indiferente, que arriesga con cada nueva generación. Y que gana (mucho) en vivo.
El Renault Clio ya no juega en su propia liga, juega a un deporte que se a puesto complicadísimo. El coche pequeño y barato con motor de combustión que, con las incomodidades propias de su tamaño, te lleva a todos lados pero que es una baza ganadora en ciudad ya no existe. Un Seat Ibiza con un motor de 116 CV (sin electrificar) ya juega en la frontera de los 20.000 euros. El Hyundai i20 más barato con etiqueta ECO (hibridación suave) también se mueve en esos precios. Todavía no ha sido desvelado el precio de este Renault Clio pero nada nos dice que será barato.
En Renault juegan a ir un pasito más allá. Si no pueden competir por precio por las obligaciones técnicas que están obligados a montar (de nuevo volvemos a las normativas europes, también en materia de seguridad), quieren ganarse el favor de los clientes por ofrecer un producto redondo, bien terminado y con una tecnología a la altura.
No es casual esa apuesta por el diseño. Pero tampoco son casuales la multitud de detalles que se pueden ver por dentro. El cuadro de instrumentos mantiene el juego de dos pantallas de 10 pulgadas que hemos visto en otros modelos del grupo. Llega impulsado por Open R Link, su sistema operativo montado sobre Android Auto, con acceso a Google Assistant, Google Maps o Google Play (ya nos adelantan que es compatible con aplicaciones de streaming como HBO o Amazon). De serie, el coche se entrega con un paquete de datos de 2 GB mensuales durante dos años.
Hay muy buenos detalles en el interior. En el salpicadero se usa un acabado textil en todas sus versiones. Los asientos parecen cómodos (habrá que confirmarlo con una prueba) y los mandos físicos tienen un buen tacto y están bien rematados. Se replica en el Clio el buen hacer de Renault en materia de ergonomía durante los últimos años y no se opta por abaratar el puesto del piloto.
Esos detalles de coche mimado son más evidentes en su nivel de acabado Alpine, con costuras azules a juego con pequeños detalles del mismo tono en las llantas o en los faros delanteros. Y molduras arriesgadas como el plástico horizontal que aquí recoge del mundo del tunning los tonos clásicos del metal quemado de los escapes con un degradado entre el plata, múltiples morados, lilas y azules. Arriesgado y un poco macarra. Tienen mi “sí” instantáneo.
El verdadero reto para Renault es convencer con un motor que justifique un mayor desembolso por un “coche pequeño”. Llega con una opción GLP de cuatro cilindros de 120 CV y un motor de gasolina tricilíndrico de 115 CV que se puede combinar con una caja de cambios manual o automática.
Pero el motor estrella y el que Renault tiene que vender mucho si no quiere que la media de emisiones se le complique es el Full Hybrid E-Tech. Un bloque de cuatro cilindros gasolina de 1,8 litros que se combina con una batería grande para un híbrido. Tenemos un acumulador eléctrico de 1,4 kWh que consiguen mantener el consumo y emisiones a raya.
El resultado es un complejo motor híbrido de 160 CV que promete un consumo en ciclo mixto, según WLTP, de apenas 3,8 litros y lo que, para la marca es más importante, unas emisiones de 89 gr/km de CO2. Para que nos hagamos una idea, su tricilíndrico sin electrificar registra 114 gr/km de CO2 con cambio manual y 116 gr/km de CO2 con cambio automático.
Eso es una losa que sólo se puede contrarrestrar con la venta de dos híbridos enchufables o un eléctrico por cada Clio sin electrificar puesto en el mercado. La multa que sobrevuela es durísima: 95 euros por gramo superado y coche vendido. Es decir, con las ventas de Renault el año pasado en Europa, que fueron de 1,28 millones de coches, hablaríamos de una sanción de 121,79 millones de coches por cada gramo de CO2 superado en la media de las ventas.
No es casual que, como decimos, Renault haya optado por la vía de electrificar su pequeño a conciencia y llenarlo de tecnología (puede incorporar hasta 29 ADAS entre los que se encuentra frenada trasera de emergencia, control de crucero adaptativo o bloqueo de las puertas si la salida no es segura).
Eso, sin duda, debería encarecer su precio. Pero al menos, todo indica que esta sexta generación del Renault Clio está muy cuidada. Si hablamos de ventas, la montaña que tienen ante sí es mayúscula, con firmas chinas que ofrecen más espacio por el mismo precio. Eso sí, no se puede decir que Renault no haya puesto toda la carne en el asador para justificar el esperado incremento de precio.
No, seguramente no será el Renault Clio más asequible de la historia. Pero es indudable que nunca se tomaron más riesgos, se cuidó tanto el producto y se le dotó de una tecnología tan avanzada. Habrá que probarlo para comprobar si el producto cumple con lo que promete.
Fotos | Xataka
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La noticia
El Renault Clio quiere ser el abanderado del futuro urbano de combustión: motor híbrido de 160 CV y un consumo ridículo
fue publicada originalmente en
Xataka
por
Alberto de la Torre
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