Las dos industrias más importantes de la provincia de Tucumán, la citrícola y la azucarera, están cerrando la temporada con resultados muy positivos. La zafra de ambos productos muestra una producción firme y precios en alza, un escenario que genera optimismo en el sector empresarial y consolida el rol estratégico de la región en la economía nacional.

Un respiro para los productores de cítricos
A pesar de los pronósticos que anticipaban una caída en la cosecha, la campaña citrícola 2025 ha superado las expectativas. Según José Carbonell, presidente de Federcitrus, la producción terminó siendo similar a la de 2024, pero con un incremento notable en las exportaciones de fruta fresca. “Hoy no se exporta más porque no hay más fruta en condiciones sanitarias y de calidad para seguir enviando a los mercados”, explicó Carbonell, destacando la fuerte demanda de Europa del Este y la Unión Europea.
El sector ha visto una mejora significativa en los precios. El jugo de limón, en particular, ha registrado un aumento en su valor, y el stock de la campaña prácticamente se ha agotado, lo que ya ha llevado a cerrar contratos para la próxima temporada. Este panorama da un respiro a los productores, que venían de seis años de crisis. Eduardo Castro, secretario de la Producción de Tucumán, señaló que los precios de la caja de limón alcanzaron valores que no se habían visto en mucho tiempo, lo que permitió que muchos productores puedan cerrar el año con sus cuentas «más o menos equilibradas». Este es un logro importante para una industria que ha perdido miles de hectáreas en los últimos años.
A nivel global, Argentina mantiene su posición como primer productor mundial de limón y líder absoluto en derivados industriales, aportando dos tercios del jugo, aceite y cáscara que se comercializan a nivel mundial.
La industria azucarera avanza a paso firme
La zafra de la caña de azúcar también avanza con resultados sólidos. Castro informó que la cosecha ha alcanzado un 68% de avance, con casi 12 millones de toneladas de caña molida. La producción de azúcar físico asciende a 630 mil toneladas, que se dividen entre azúcar blanco y crudo.
Las exportaciones de azúcar crudo son un pilar clave en este sector. Hasta ahora, se han producido unas 250 mil toneladas para exportación, con la expectativa de llegar a 500 mil toneladas para el fin del año. Además, la producción de alcohol también viene muy bien. “Calculamos que entre 600 mil y 650 mil toneladas de caña se destinarán a la producción de alcohol este año”, indicó el funcionario.
Estos números, sumados a la estabilidad de los precios del azúcar, reflejan un escenario alentador para la economía de la provincia. La producción azucarera, al igual que la citrícola, consolida su rol como motor de desarrollo, generando empleo y dinamizando el comercio local.
En un contexto de desafíos económicos, la solidez y el crecimiento de estas dos industrias en Tucumán demuestran la resiliencia y el potencial del sector productivo regional, ofreciendo un modelo de negocio sostenible y de gran impacto para el desarrollo de la provincia y del país.