Ya sea que ames su trabajo o que no sea para ti, uno de los creativos que a nadie deja indiferentes en la industria de los videojuegos es Hideo Kojima. Quien es considerado como uno de los visionarios que revolucionaron la narrativa en los videojuegos con series como Metal Gear Solid ahora opera de manera independiente y tras seis años de que viéramos su primer juego fuera de Konami, estamos ante su segunda gran producción.
Esto es Death Stranding 2: On The Beach. Es momento de retomar la historia de Sam Porter Bridges en un universo post-apocalíptico en el que el mundo de los vivos y el de los muertos están conectados y son el telón de fondo perfecto para contar historias, de esas que dan mucho de qué hablar, con personajes bien construidos, el toque único de la experiencia que solo se logra con los videojuegos y el sazón especial de uno de los grandes creativos de la industria.
¿Qué buscaban Hideo Kojima y su equipo con una nueva entrega de Death Stranding? ¿Es Death Stranding 2 un buen videojuego?¿Vale la pena esta exclusiva de PS5?
Ya lo jugamos de principio a fin, por cerca de 80 horas, para traerte nuestro veredicto.
Una historia cargada de simbolismo y referencias, de esas que se analizarán por meses
En 2019, cuando tuvimos acceso al primer Death Stranding para hacer una reseña, fue complicado explicarle al mundo qué demonios era este juego. ¿Tenían sentido los crípticos tráilers que presentaban un juego lleno de talentos de Hollywood? ¿Era esto un simulador de caminar?¿Por qué un juego que tiene como objetivo entregar paquetes podía ser divertido?¿Cómo se puede contar una historia en medio de todo esto?
Pues bien, si llegaste a esta reseña es muy probable que hayas jugado al primer Death Stranding y ya tengas respuesta a esas preguntas. Si no lo has hecho, te recomendamos mucho hacerlo, no solo porque es una continuación directa en su historia, sino porque también el primer juego sienta las bases jugables de una nueva entrega que, con todo y sus cambios, da continuidad a lo que vimos hace 6 años.
A diferencia de su primer viaje donde la soledad era la constante, ahora Sam no estará solo
¿Necesitas refrescar la historia del primer juego? Acá vas a encontrar en el menú un pequeño resumen, pero al ser una historia con tantas aristas, la verdad es que es únicamente lo más esencial y sabe a poco. Te recomendamos complementarlo con algún otro recurso, pues el primer juego hasta adaptación a novela tiene.
Situado 11 meses después de que Sam Porter Bridges conectara a la red quiral todas las ciudades de la UCA –o lo que quedó de los Estados Unidos tras el evento apocalíptico conocido como Death Stranding–, lo que parece como el inicio de una vida tranquila para Sam al lado de su bebé, Lou, se interrumpe por una nueva misión. La amenaza de una nueva extinción lleva a que Fragile busque al legendario ‘Porter’ o mensajero que ya salvó al mundo una vez para que lo haga de nuevo.
Hay que seguir expandiendo la red quiral, ahora bajando de los Estados Unidos hacia México y luego mucho más allá, pues están apareciendo las Puertas de Placa que conectan continentes. Tu aventura seguirá en Australia, que se convierte en el escenario principal en el que vivirás la mayoría de las nuevas aventuras de esta entrega de la serie.
A diferencia del primer juego donde sentías la soledad de Sam en casi toda la aventura, acá es más bien una historia que involucra a un grupo de personajes que conforman la tripulación de la DHV Magellan, una nave que funciona como base de operaciones y que es capaz de moverse bajo las corrientes de alquitrán. Es como si Fragile, a través de Drawbridge —la nueva iniciativa que equivaldría a lo que fue Bridges en el primer juego—, ensamblara a su grupo de Avengers con increíbles personajes que tienen en común los poderes que les confiere tener la condición a la que se conoce como Dooms. Entre este grupo de personas distintas, está Sam, quien sigue fungiendo como el mensajero legendario que llegará hasta los confines de cada continente para conectar a todos a la red quiral, pero ahora con un equipo que lo respalda.
La tripulación de la DHV Magellan cobra mucha importancia en la narrativa de esta secuela.
Esto no quiere decir que Death Stranding 2 pierda la línea de tener momentos de suma contemplación y reflexión que tuvo su predecesor como uno de sus altos valores. Están estos viajes en los que un ángulo de la cámara, el paisaje y una canción perfecta aderezan momentos memorables en los que únicamente te debes dejar llevar por lo que estás viendo. El trabajo de Woodkid y Ludwig Forssell en la banda sonora es fenomenal y un ingrediente fundamental de la experiencia, así como lo es también una muy buena selección de música licenciada con la que descubrirás temazos que fijarán los recuerdos de este viaje en tu cabeza.
Si bien la narrativa es fragmentada y se va ofreciendo en pequeñas dosis — concentrándose mayormente en la recta final del juego, como en el primer Death Stranding— algo que se hace muy bien a lo largo de toda la campaña es la manera en que se construye magistralmente a la tripulación de la DHV Magellan, con quienes es fácil empatizar, encariñarse y admirar. El juego está lleno de pequeñas interacciones constantes y detallitos de los personajes que te van a encantar.
Dollman se lleva uno de los roles principales, al ser un acompañante parlanchín fijo para Sam, que además resume muy bien puntos clave de la trama para que no te pierdas lo que es importante recordar.
Death Stranding 2 sigue teniendo momentos donde un viaje se complementa con una canción para crear una experiencia memorable.
Sin arruinarte ninguna parte de la trama, debes saber que te espera un relato profundo, conmovedor, que despierta emociones encontradas y que reflexiona en situaciones de nuestro presente y la sociedad al puro estilo de Kojima. Son constantes las cinemáticas largas magistralmente dirigidas, actuadas y construidas, de esas que te enchinan la piel. También hay momentos rarísimos y excesivamente extraños, de esas cosas que solo a Kojima se le ocurre dejar como pinceladas de lo incómodamente bizarro y exagerado que puede llegar a dividir las opiniones. Espera muchas, pero muchas sorpresas y toneladas de referencias a todo lo que Kojima ha hecho. ¿Fan de Metal Gear Solid? Te vas a sentir como en casa y el simbolismo es tan brutal y abrumador, que es de esas cosas que se van a analizar por mucho tiempo.
Tras disfrutar de toda la historia, hasta ver rodar los créditos, puedo decirte que logró conmoverme hasta las lágrimas en un par de ocasiones y mover muchas emociones en mi interior. Me dejó temblando con sentimientos mixtos y me dio una chispa de motivación que, personalmente, solo encuentro en esto que es lo que más amo: los videojuegos. Es de esas historias que hacen que te explote la cabeza en el momento en el que todos los hilos se juntan y todo decanta en un desenlace lleno de acción, momentos épicos, cosas súper extrañas e impulsos para mover tus emociones. Me dejó un pequeño vacío de tanto que disfruté todo el viaje y el relato, algo que no me pasa con muchos juegos del mercado.
Death Stranding 2 está cargado de buenas cinemáticas y excelentes personajes para dar vida a una buena historia.
Una vez más, esto es un juego de hacer entregas
Pero fuera de su narrativa, ¿qué tal es como videojuego? Es importante dejarlo claro desde el inicio: Death Stranding 2: On The Beach sigue siendo un juego de hacer entregas, pero no nos malinterpretes, eso no significa que no haya cambios ni evolución a esa fórmula: sí que los hay y se notan desde la primera hora de juego.
La estructura general no es muy distinta a la del primer Death Stranding. Hay misiones principales que, por lo general, son llevar una carga importante de un punto de control a otro, donde te esperan los preparacionistas o responsables de cada asentamiento. Estando ahí, con tu Q-Pido, conectarás un nuevo sector del mapa a la red, y esta red quiral te dará la oportunidad de construir infraestructura de vital importancia para sobrevivir o hacer más llevadero el viaje, así como aprovechar otras estructuras y herramientas que otros cargadores como tú han dejado a su paso.
Además de las misiones principales hay pedidos ordinarios que te permiten subir de nivel cada asentamiento para obtener nuevas recompensas, así como pedidos secundarios que digamos que son como pequeñas historias que complementan la aventura principal de Sam –todas muy buenas, así que recomendamos no te las saltes. Complementando todo esto, también el mundo de Death Stranding 2 tiene como novedad algunas otras misiones e historias un tanto espontáneas que pueden surgir de pistas que te dan los personajes que vas conociendo o simplemente suceden a tu paso mientras exploras. También hay algunos sectores del mapa que se conectarán únicamente si tienes la curiosidad de explorar y completar contenidos secundarios.
Volvemos a tener un juego en donde las entregas son el centro del gameplay.
El día a día es entregar cargas. Algunas son frágiles, otras propensas a las temperaturas, también hay peligrosas. A veces no te dan lo que tienes que entregar, pues hay que irlo a recuperar a alguna parte. En ocasiones hay que meterse entre las filas de enemigos humanos o zonas de CVs para obtener las cargas.
Básicamente, toda la aventura será un viaje alrededor de un gigantesco mundo abierto mayormente natural y futurista, en el que hay todo tipo de sorpresas, peligros y una historia en medio de todo ello.
Un juego más variado y espectacular en lo visual
Hasta aquí todo suena más o menos igual al primer juego, pero ¿qué hay de nuevo? Principalmente, que estamos ante un juego con más variedad de actividades, un mundo abierto más dinámico y vivo, así como un volumen mucho más alto de enfrentamientos contra amenazas humanas y sobrenaturales desde el inicio. Vamos, es un juego con muchísima más acción, donde siempre tienes la opción de acabar con las amenazas en sigilo, abrir fuego en épicas batallas o simplemente correr de los peligros. Lo decíamos desde los previos y volvemos a repetirlo, acá hay un sabor fuerte a un Metal Gear Solid de mundo abierto y eso no es una mala noticia.
Lo anterior es posible por dos razones. La primera es un tema creativo: Kojima y su equipo ya le enseñaron a los jugadores de Death Stranding de qué va un juego centrado en las entregas y acá nos vamos más directos a la acción desde el inicio: básciamente, todo lo que estaba en la edición Director’s Cut del primer Death Stranding está de regreso al lado de muchísimas novedades, armamento y herramientas para hacer un juego más completo a nivel mecánico. El segundo es un tema técnico: al ser un juego de una generación más reciente de hardware, hay elementos como el ciclo activo del día y la noche o el clima dinámico que se suman a un mapa titánico en sus dimensiones para ofrecer el sandbox de entregas definitivo.
Ya que hablamos de lo técnico, podemos decir que Death Stranding 2 impresiona desde el primer minuto por sus visuales. El motor Decima de Guerrilla brilla con fuerza cuando se representan tanto escenarios enormes con calidad fotorealista, una gran distancia de dibujado, cielos impresionantes y excelente iluminación, así como la intensidad de la acción en enfrentamientos con adversarios de todos tamaños, incluidos algunos de colosales dimensiones. Esto sumado a una impecable dirección de arte, usos inteligentes de la cámara y una buena interfaz de usuario poco invasiva nos dejan ante un juego que impresiona en lo gráfico. Al ser una experiencia bastante contemplativa que busca despertar sentimientos únicamente por lo que ves, cómo lo ves y lo que escuchas mientras esto pasa, lo anterior es muy importante y poco hay que reprocharle a Kojima Productions al respecto.
Combinando un motor gráfico con desempeño excelente y una gran dirección de arte, los visuales de Death Stranding 2 son uno de sus puntos más fuertes
Un mapa titánico con clima dinámico
¿Cómo impacta el ciclo del día y los eventos climáticos extremos a la jugabilidad? Básicamente es una nueva capa de complejidad en las misiones. Terremotos, lluvias torrenciales e incendios suponen nuevos retos, sobre todo al estar en zonas de alta complejidad en las entregas como las montañas. Un río que pasarías sin problemas en un día promedio, puede ser una amenaza cuando su cauce ha crecido por las lluvias. De noche quizá es mejor planear una infiltración en un campamento enemigo, aprovechando que tienes la oscuridad a tu favor. Cuando te tocan amanecer y atardeceres en el lugar correcto, tendrás una bella postal, un momento y una experiencia que podría ser muy distinta al que vivirá otro jugador.
El mapa tiene un muy buen diseño para convertirse en un titánico sandbox de entregas: cordilleras, montañas, desniveles, ríos y más rasgos geográficos separan de manera magistral áreas reconocibles que vas descubriendo a la campaña e irás memorizando como la palma de tu mano. En esencia también estamos ante un juego de navegación y planeación de rutas, cuando ves cómo está estructurado todo para ir acomodando las misiones de la campaña y descubres tus propias rutas con tu creatividad, infraestructura y herramientas, la exploración se convierte en algo muy disfrutable.
También es justo decir que hay una variedad más amplia de ecosistemas con respecto al primer juego y también hay nuevos ingredientes a la naturaleza como la presencia de animales a los que hay que llevar a un refugio para protegerlos de la ‘mengua’ –que es la lluvia sobrenatural y dañina del juego. Debo confesar que me convertí en un adicto a capturar y rescatar animales de todos tamaños y fui bien recompensado, pues hay algunos especímenes raros que irás descubriendo; a veces tienes que ser creativo para atraparlos.
Death Stranding 2 tiene ecosistemas más viarados con resecto a su predecesor.
Vehículos e infraestructura: la clave en la exploración
Un mundo más grande y exigente en su diseño comparado con el primer juego no te dejará desprotegido. Una vez que desbloqueas el Tricrucero y el Camión Todoterreno es muy posible que la mayor parte del tiempo estés a bordo de vehículos, pues las cosas también han mejorado mucho en temas de la conducción. Muchas misiones incluso tienen volúmenes enormes de carga que serían muy desafiantes de entregar sin vehículos.
La buena noticia aquí es que a lo largo de la campaña irás recibiendo un montón de aditamentos para los vehículos, que van desde baterías extra hasta dispositivos que reducen la gravedad, placas defensivas, tipos de ruedas y un buen arsenal de armas montables para protegerte de las amenazas y sí, también puedes disparar tus armas desde el asiento del conductor. Hay otras sorpresas más del lado de las mecánicas de movilidad, pero te vamos a dejar que las descubras.
Conectar un mundo más grande con infraestructura como autopistas no va a ser sencillo, por lo que valorarás aún más los preciados recursos que puedes obtener como botines al asaltar campamentos enemigos. También están las minas que te permiten extraer materiales bajo demanda y los monorieles con los que puedes mover enormes volúmenes de carga entre algunos de los principales centros de distribución.
El monoriel es solo uno de muchos agregados al juego en temas de movilidad.
El combate: nuevo eje de la experiencia en Death Stranding 2
Ahora bien, ¿de qué serviría un mundo más grande y ambicioso si no estuviera lleno de desafíos? Es así que pasamos a uno de los nuevos ejes en la experiencia de Death Stranding 2, que son los combates.
El encuentro con amenazas humanas en el mapa es casi inmediato en la aventura, y lo mismo ocurre con la manera en la que el juego te ofrece, gradualmente, un arsenal inmenso de armas y herramientas de supervivencia como recompensas por ayudar a los asentamientos. Pistolas silenciosas, ametralladoras, escopetas, lanzagranadas, misiles, rifles de francotirador y una enorme variedad de granadas se unen a clásicos como la boleadora que sigue siendo muy útil en las infiltraciones sigilosas.
Pero eso no es todo, también hay varios exoesqueletos óptimos para la exploración o el combate, distintos tipos de botas, guantes, trajes con distintos camuflajes para distintas situaciones y un abrumador etcétera. El remate es la personalización de la mochila, que está de vuelta con un sinfín de herramientas útiles para que expandas atributos como tu batería, capacidad de municiones o espacio para herramientas.
Las cosas mejoraron mucho en temas del combate y acción con respecto al primer juego.
El combate mejoró mucho con respecto al primer juego, principalmente por el mar de opciones que tienes en el equipamiento y herramientas diseñadas para tal fin. Limpiar zonas de enemigos es tan satisfactorio si lo haces en completo sigilo, como si eres localizado y llega el momento de abrir fuego contra los rivales. Es más, hasta puedes pedir soporte de la DHV Magellan con fuego de cobertura y hay muchas misiones de la campaña dedicadas exclusivamente a los combates; van desde los tiroteos que recuerdan a las misiones de Cliff del primer juego, hasta enfrentamientos contra jefes.
Muchas de las mejoras a los combates se las debemos a la variedad de adversarios. Del lado de los humanos puedes encontrarte con campamentos bien reforzados, con torres de vigilancia, torretas y un intrincado sistema de estructuras que debes observar bien. Los enemigos tienen distintos grados de blindaje, armamento variado como el tuyo y también usan vehículos; llega una parte de la campaña en los que incluso pueden asaltarte en plenas carreteras a bordo de motocicletas, por lo que habrá que poner a prueba la puntería en movimiento.
Cobran tanta importancia las mecánicas de sigilo y combate, que encontrarás una buena sección de entrenamientos y pruebas arcade contrarreloj en la habitación privada de Sam que nos recuerdan muchísimo a lo que habíamos visto en los juegos de Metal Gear Solid.
Del lado de las CVs o BTs, es decir, las amenazas sobrenaturales, también hay variedad para eliminar la monotonía de enfrentar a pocos tipos de enemigos que tenía el primer juego. Hay sorpresas en las mecánicas de juego y te puedo adelantar que una de mis partes favoritas fue poder usar a mi favor a estos extraños seres del más allá como si fueran Pokémon; ya descubrirás más ahora que juegues.
México tiene una fuerte presencia en los contenidos de Death Stranding 2. Algunas de las mejores secuencias de acción suceden en tierras mexicanas.
Hay que comprometerse bastante para disfrutar de la mejor parte del juego
Al final del día podríamos seguir hablando por mucho, muchísimo tiempo de todo lo que hace de Death Stranding 2 un juego más variado, sólido y completo que su predecesor en todos sentidos, pero es hora de dejar los controles en tus manos.
El ritmo del juego en términos generales es bueno por la variedad que viene desde el mundo abierto hasta los distintos tipos de misión en los que tienes una infinidad de opciones para abordarlas pues siempre estarás desbloqueando nuevas herramientas y armas para generar nuevas estrategias, incluso cerca del final del juego para motivarte a regresar tras ver los créditos a experimentar con distintas formas de jugar.
Si te desvías mucho de la línea de las misiones principales y secundarias para limpiar por completo el mapa y subir de nivel al máximo a todos los preparacionistas el juego sí que podría entrar en un ritmo monótono y encontrarse los hilos de su estructura tras muchas horas de estar haciendo entregas muy similares, pero afortunadamente son muchísimos más los ingredientes que se agregaron al sandbox, con respecto al primer juego, para que eso no suceda.
Quizá un reproche válido para algunos también podría ser que la mayoría de la historia se concentre en la recta final del juego, pues es alto el nivel de compromiso que hay que tener para poder saborear esa parte. Fuera de eso, la verdad es que hay mucho que reconocer a Death Stranding 2 por su evolución y poco que reclamarle por su estancamiento.
La mayoría de los contenidos de la historia se concentran en la recta final del juego, eso requiere un compromiso importante por parte del jugador.
¿Vale la pena Death Stranding 2: On the Beach?
Entonces, ¿vale la pena? Si te gusta el trabajo de Hideo Kojima ni siquiera lo pienses dos veces: vale cada centavo y te encontrarás una de las mejores obras del genio nipón y un equipo que viene trabajando con él desde la era de Konami.
Jugabilidad, construcción de mundo, mecánicas de juego, armamento y herramientas al por mayor, misiones cargadas de acción, batallas épicas, soundtrack de escándalo, historia… Death Stranding 2 lo tiene todo y el resultado es excelente. Si no te gusta el estilo de Kojima también debes saber que acá hay elementos que van a dividir opiniones, sobre todo momentos de la campaña, pero ya podremos hablar de ello después de que lo juegues.
Sí, vale mucho la pena y, sin dudarlo, estamos ante uno de los mejores juegos de 2025 y de la generación.
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La noticia
Hideo Kojima se quiere llevar el GOTY y lo vuelve a hacer con un juego de entregas. Reseña de Death Stranding 2: On the Beach. ¿Vale la pena?
fue publicada originalmente en
3DJuegos LATAM
por
Juanem Reyes
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