Una reciente jornada en la provincia reveló nuevas oportunidades de inversión y desarrollo en el sector maderero, con foco en tecnología, bonos de carbono y financiamiento climático.

Para las empresas y emprendedores que buscan nuevos horizontes de inversión y crecimiento, la forestoindustria en Tucumán se perfila como un sector con un potencial inmenso. El IDEP (Instituto de Desarrollo Productivo), en colaboración con la Mesa de Foresto Industria de Tucumán (MEDEFIT), organizó la 2° Jornada Foresto Industrial: Proyectos Sostenibles. Este encuentro estratégico reunió a productores, empresarios, y una amplia gama de expertos de instituciones técnicas y científicas, todos con el objetivo de abordar el notable déficit maderero de la provincia y convertirlo en una oportunidad de negocio verde y rentable.
Juan Casañas, vicepresidente del IDEP, destacó la visión de desarrollo: «Nuestro propósito es claro: mostrar el gran negocio que representa la forestoindustria y las posibilidades que ofrece para el crecimiento económico. Desde el IDEP, nuestro rol como organismo articulador es precisamente ese: impulsar y potenciar nuevos sectores productivos, tal como nos ha encomendado el gobernador Osvaldo Jaldo». Por su parte, Miguel Reginato, titular de MEDEFIT, enfatizó la dualidad de beneficios: «La forestoindustria es una actividad con enorme potencial de crecimiento en Tucumán, no solo por su impacto económico directo, sino también por los inmensos beneficios ambientales que conlleva. Ofrece a las empresas y a los inversores posibilidades significativas, con buenos retornos y claras ventajas para el medio ambiente. Plantar árboles es una inversión que también piensa en las futuras generaciones».
La jornada se estructuró para ofrecer una visión completa del sector. Se abordaron temas desde la identificación de «Sitios con potencial para el desarrollo forestal» a cargo de Luis Fornes del INTA Famaillá, hasta un «Análisis del negocio forestal en Tucumán y alternativas rentables» presentado por Luciana Vega del IDEP y Miguel Reginato.
La tecnología es el nuevo horizonte de inversión
Para las empresas y emprendedores con visión de futuro, el segmento más revelador fue el dedicado a la aplicación de nuevas tecnologías en la cadena forestal. Martín Rearte, especialista en bioenergía del INTI Tucumán, presentó «Proyectos de Energía con la Biomasa Forestal en la Región», abriendo la puerta a inversiones en energía renovable y procesos eficientes.
La innovación disruptiva llegó con las presentaciones de Lucas Cepeda y Agustín Dalla Fontana, de la Asociación Cultural para el Desarrollo Integral (ACDI). Cepeda destacó «Bosques Verificados – trazabilidad forestal con blockchain», una tecnología que promete transparencia total y seguridad en la cadena de valor de la madera, garantizando la sostenibilidad y el origen legal, algo cada vez más valorado por los mercados internacionales. Dalla Fontana, por su parte, presentó Forest Maker, una plataforma digital pensada para democratizar y optimizar las inversiones en proyectos forestales, conectando a inversores con oportunidades rentables de manera ágil. Además, Silvia Pacheco de Proyungas, expuso «Carbono Transparente: Plataforma para visualizar datos de carbono y biodiversidad», una herramienta esencial para el monitoreo y la valuación de créditos de carbono.
Inversión verde: Bonos de carbono y biodiversidad

La Jornada también profundizó en el financiamiento climático y las oportunidades de inversión verde. David Flores de la Fundación Miguel Lillo e Ignacio Gasparri del CONICET, explicaron el «Marco Conceptual y Legal de los Bonos de Carbono y de los Bonos de Biodiversidad», instrumentos financieros que están ganando tracción global y ofrecen nuevas vías de monetización para proyectos sostenibles. Mariano Salerno, de ACDI, compartió «Experiencias de Proyectos de Carbono en el Sector Forestal y las Tendencias del Mercado», brindando una perspectiva práctica sobre cómo participar en este creciente mercado.
El encuentro no solo fomentó la diversificación productiva, sino que también dejó en claro el compromiso del IDEP y MEDEFIT en impulsar proyectos que integren innovación, sostenibilidad y financiamiento climático. Para empresas y emprendedores, la forestoindustria tucumana se presenta como un sector maduro para la inversión, donde la tecnología y la visión a largo plazo prometen redefinir el éxito empresarial.