La Sociedad Rural de Tucumán (SRT) ha desvelado un ambicioso «masterplan» que busca transformar sus instalaciones en un dinámico centro de negocios, tecnología y eventos. Lejos de ser un simple proyecto de infraestructura, la iniciativa es vista por sus promotores como un motor económico que posicionará a la provincia como un jugador clave en la industria de convenciones a nivel nacional.

El proyecto, presentado por José Frías Silva, presidente de la SRT, y el arquitecto Álvaro Aguirre del estudio «Aguirre + Vázquez,» no solo contempla la construcción de un centro de convenciones, sino que integra la innovación y el desarrollo empresarial en su núcleo. Con una inversión estimada que podría superar los millones de dólares, el plan se articula en torno a dos áreas estratégicas.
La primera es el desarrollo de un centro de convenciones de 8.000 metros cuadrados. Este espacio multifuncional está diseñado para atraer eventos de gran escala, desde congresos empresariales y tecnológicos hasta ferias sectoriales. Según el arquitecto Aguirre, la propuesta incluye oficinas administrativas y, lo que es más relevante para el sector, espacios tecnológicos vinculados al campo. Esta última característica es clave, ya que busca fomentar la sinergia entre la tradición agropecuaria de la región y la innovación, promoviendo el desarrollo de agrotechs y startups del sector.
La segunda área de la iniciativa es un parque urbano de uso permanente. Este espacio se transformaría en un moderno mercado, un «hub» de la rural que no solo ofrecería productos gastronómicos y artesanales, sino que también funcionaría como un punto de encuentro para la comunidad de negocios. Se espera que este mercado, al igual que los mercados gastronómicos de otras grandes ciudades, se convierta en un espacio de networking informal y de lanzamiento de nuevos emprendimientos.
Domingo Amaya, presidente del Ente Tucumán Turismo (ETT), expresó su entusiasmo por la iniciativa, destacando su potencial para generar un impacto económico significativo. «Este tipo de actividades trae dos tipos de consumo: el que viene a los congresos y el acompañante que hace turismo de ocio, lo que genera un gran dinamismo», afirmó Amaya. La llegada de miles de profesionales y empresarios para congresos y eventos no solo llenaría hoteles y restaurantes, sino que también abriría la puerta a la creación de nuevas empresas de servicios, logística y tecnología de soporte.
En un contexto donde la digitalización y la conectividad son vitales para el crecimiento, un centro de convenciones de esta magnitud, equipado con tecnología de punta y enfocado en la interacción empresarial, podría ser el catalizador que Tucumán necesita para consolidar su liderazgo en el norte argentino. El «masterplan» de la Sociedad Rural es más que un simple proyecto de construcción; es una apuesta audaz por el futuro de la provincia como un polo de innovación, inversión y desarrollo de negocios. Si se concreta, la inversión no solo se medirá en metros cuadrados, sino en la capacidad de atraer talento y proyectos de alto valor añadido a la región.